La presentación de un nuevo Ferrari siempre es un acontecimiento. Y que la firma de Maranello presente hoy el Ferrari SF90 XX Stradale y el Ferrari SF90 XX Spider, variantes extremas del Ferrari SF90, no es ninguna excepción.
Lucir las siglas XX implica que se trata de las versiones más radicales del Ferrari SF90, cuya puesta a punto y aerodinamismo están pensados para un uso en circuito.
Al hablar de una serie especial, lo hacemos concretamente de 799 ejemplares para el Stradale y de 599 para el Spider, con un precio de salida en Italia de 770.000 y 850.000 euros, respectivamente.
Y sí, según nos han confirmado fuentes de la marca, todos los ejemplares han encontrado ya comprador. Y en cuanto a las entregas, comenzarán en el segundo trimestre de 2024.
Pero vamos a hablar de lo que nos inquieta siempre de estos maravillosos ejemplares; su motorización.
Estamos hablando que posee un motor V8 4.0 biturbo situado en posición central trasera, que rinde ahora 797 CV, frente a los 780 CV anteriores. Alcanzada a un régimen de 7.900 rpm, aunque el auto sube hasta 8.000 vueltas, con el corte a 8.300 rpm. Su par motor máximo es de 804 Nm a 6.250 rpm. También hablamos de que se han modificado la admisión, el escape y los pistones.
La potencia combinada de los tres motores eléctricos (un MGU-K entre el V8 y la caja de cambios. Y dos motores eléctricos en la parte delantera para la tracción total) se ha incrementado de 220 a 233 CV. Siguen alimentados por una batería de 7,9 kWh que ofrece 25 km de autonomía eléctrica en el ciclo WLTP, con una velocidad máxima de 135 km/h. (En España no tendrá etiqueta CERO sino ECO).
La potencia total ha aumentado de 1,000 a 1,030 CV. La transmisión sigue una caja de cambios de doble embrague y ocho velocidades, con nuevos desarrollos. El SF90 XX también incorpora un modo «extra boost», que proporciona un ligero aumento de potencia durante unos segundos con sólo pulsar un botón.
Algo que siempre nos impresiona es la evolución en cuanto a la aerodinámica y este par de ejemplares no serían la excepción. Entre los cambios más evidentes nos encontramos con un enorme alerón que domina la silueta.
Y esto señores, no es un hecho anecdótico, ya que Ferrari nunca ha sido partidario de los alerones fijos en los modelos de calle. Como clara muestra tenemos los modelos F40 y F50, que fueron sus dos últimas propuestas con un alerón fijo.
Pero en este caso era necesario para cumplir los objetivos del XX de mejorar la carga aerodinámica y también, probablemente, para añadir el dramatismo visual que distingue claramente al SF90 XX del SF90 de serie.